Urte berri on!
Pd: Foto de una servidora
Pd: Foto de una servidora
De vez en cuando, sin orden ni concierto previo, tienes uno de esos días en los que sólo te apetece quedarte en casa, envuelta en el edredón y no moverte en todo el día. Pero como siempre sucede cuando entras en ese estado de "hibernación utópica" no hay posibilidad de quedarse en casa y tienes que salir de casa y plantarte en el curro.
No sé si lo habré dicho antes aquí, en mis conversaciones mentales en el bus o donde pero, hay gente que tiene una capacidad para cambiar de... forma de ser de un minuto a otro, acojonante. Igual que su facilidad para hacer que tu día se joda en un segundo de una manera pasmosa.
1º) Después de casi un mes, ya he terminado con la última sustitución del verano. Me ha dado pena para variar. Han sido muchos días estando con la gente 10-11 horas diarias, sábados, madrugones para entrar a las 6 de la mañana, corazones a punto del colapso por situaciones al límite, malos ratos pasados por discutir con uno u otro, horas de darle vueltas a comentarios escuchados en boca de aquellos por los que estoy allí para su bien; promesas de pisar La Catedral para ver el Atlhetic-R.Madrid; nuevos conocimientos adquiridos sobre trabajos que no había vivido hasta el momento; risas por intentar hacerme entender en mi chungo-inglés de barrio con una chica francesa... etc etc etc.
Yo también tengo mis repuntes de espíritu de la responsabilidad en cuanto a trabajo se refiere. Y hoy ha resurgido tras las casi 2 horas de reunión de seguridad que hemos tenido en la obra. Comentando los detalles que han aparecido en la misma, con el jefe de obra, hemos llegado a la triste conclusión de que hasta que no echemos a algún trabajador el resto no va a terminar de espabilar.
Con el calor del veranito llegan las vacaciones de la gente; gente a la que te toca cubrirle en la obra mientras ellos están repantingados en una toalla poniéndose más rojos que el cangrejo sebastia.
Pd: y ahora es cuando pregunto al aire, ¿por qué leches no la estrenaron en España?



Grande Jacko, descansa en paz majo.
(1958-2009)

Pensaba que me estaban vacilando cuando me lo dijeron ayer, o ante ayer al mirar mi correo en casa. ¿En serio? Venga ya hombre... Vale que prácticamente hasta el más mínimo movimiento tiene un consumo y demás, pero... No sé, era algo que en ningún momento me paré a pensar con detenimiento y conciencia mundial-ecológica-espiritual, pero que cuando lo supe me dejó un tanto flipada por un buen rato (lo cuál no es del todo difícil de conseguir pero bueno, que me dejó con la mosca tras la oreja vamos). Lo primero de todo que me ha sorprendido es la cantidad de caras conocidas que me he encontrado. Empezando por el prota, el amigo de los pájaros y del pequeño de los Scofield; seguido de una de las tantas demonias que han pasado por Supernatural y que es residente en este caso; seguido de la pelirroja-castaña que no consigo ubicarla pero que me resulta más que familiar.


Como alguien me diga que es cosa del destino, ya le pueden dar mucho por c***.
Y sí, estoy de mala hostia ¬¬ ¿algún problema?
.jpg)
Ala, a jugar a pala maj@s
"El que llegue primero, se salva!!! No vale caerse!!"

Si el otro día me cagaba en todo lo cagable por culpa de la película de turno que se le ocurrió a algún iluminado programar para un día entre semana por la tarde, hoy, os voy a hacer partícipes de mi "recuperación de la fe en el cine". Uno de los que han conseguido que ocurriera algo semejante es el joven Lars, yankee, religioso e interpretado por Ryan Gosling.
Sí, habéis leído bien. Imaginaos la cara de su hermano y su cuñada cuando se la presenta una noche y cenan los 4 juntos.
Hace un tiempo hablé del gran Oso Parrillas (léase Bear Grylls) como gurú de la supervivencia. Hoy, aunque hace tiempo que ya lo sabía y seguro que vosotros también, ver las películas de sobremesa de cualquier cadena sobre desastres naturales es la mejor guía de supervivencia que os podáis encontrar.